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Qué será, qué es?:
Cuando tengo calor frío
y no frío sin calor 
y sin ser ni mar ni río 
peces en mí he visto yo?

 La sartén

De bello he de presumir,
soy blanco como la cal,
todos me saben abrir,
nadie me sabe cerrar.

El Huevo 

¿Qué será, qué es?
Todo el mundo lo lleva, 
todo el mundo lo tiene, 
porque a todos les dan uno
en cuanto al mundo viene.

 El nombre

Cae de la torre y no se mata,
cae en el agua y se desbarata.

 El papel

Es copa redonda y negra:
boca arriba está vacía 
y boca abajo está llena.

El sombrero

¿Qué es lo que todos toman 
y nadie roba?

 El sol

Chiquita como un ratón, 
guarda la casa como un león.

 La llave

Hay un hijo
que hace nacer
a la madre 
que le dio el ser.

 El hielo

Dos hermanos son,
el uno va a misa
pero el otro no.

El vino tinto y el blanco

¿Qué es alto alto como un pino, 
pesa menos que un comino?

 El humo

En el monte, grita
y en la casa es mudita? 

El hacha

Mientras más grande,
menos se ve.

 La oscuridad

 

 

 

 

Alto y grandote,
con un diente en el cogote.

El asador.

Garra, pero no de cuerpo,
pata, pero no de vaca.

La garrapata.

Dos niñas a la par,
que no se pueden mirar.

Los ojos.

Entra cantando,
sale llorando.

El balde.

Tras, tras,
la cabeza para atrás.

La lechuza.

Negro bocón,
petiso y panzón.

El mortero.

Un cercado
bien arado
donde la reja
no ha entrado.

El tejado.

Una vieja corcoveta
tuvo un hijo enredador,
unas hijas buenas mozas
y un nieto predicador.

La viña

Come por el lomito,
destila por el piquito.

La pava.

Una yegüita mora
con riendas en la cola.

La aguja.

En el campo monterano
hay un fraile franciscano,
tiene dientes y no come,
tiene barba y no es hombre.

El choclo.

Una yegüita blanca
salta cerros y barrancas
no se manca.

La luna.

Ovillejo, ovillejo,
cara de indio viejo.

El quirquincho.

En Salta estaba,
aquí estaba
y siempre estaba.
                        La taba.
 
Salta y Salta
y la colita le falta.

El sapo.

Mas largo que un pino,
pesa menos que un comino.

El humo.

Blanca en mi nacimiento,
morada en mi vivir,
y me voy poniendo negra
cuando me voy a morir.

La mora.

Oro no es,
plata no es,
abrí la cajita
y verás lo que es.

La nuez.

Yo corro como un potro
y un poco más tal vez, pero aunque tengo alas,
volar nunca me ves...
En tu casa mis plumas
están, ¡Y yo no estoy!
Puedo tragar piedritas.
¿Adivinas quién soy?

El avestruz

Blanco fue mi nacimiento
negra fue mi mocedad,
se me peló la cabeza
y no sé por qué será.

El cóndor.

Entre muralla y muralla,
hay una flor colorada;
llueva o no llueva,
siempre está mojada.

La lengua.

En aquel monte escabroso
me dijeron que abra el ojo.

El abrojo.

Fui al mercado
compré un negrito;
y ya en mi casa,
es coloradito.

El carbón.

En el campo me crié,
dando voces como loca,
me ataron de pies y manos
para quitarme la ropa.

La oveja.

   
Galán caballero,
chaleco blanco,
sombrero negro.

El teru-tero.

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